HILO DE AGUA

EL MACRAMÉ DE LA VIDA

El río Cauca, hilo de agua, por el que fluye la vida, es fuente de miles de historias que hablan de tradiciones y formas de vida que como hilos multicolores tejen la manera de ser de las personas que habitan sus orillas. Contar esas historias para dejar una huella que se mantenga viva en la memoria es el propósito de este ejercicio de tejer y grabar Si hiciéramos una comparación (evidentemente simplificando), la/nuestra vida se podría comparar con un macramé compuesto de múltiples y variados hilos (de diferentes tamaños, colores, materiales.) acorde a las diferentes personas que nos rodean o han pasado por nuestra vida, a la relación, y a las vivencias que hayamos tenido no sólo con esas personas, sino también con los lugares que habitamos y las cosas que hemos ido cargando de historia. Tales vivencias-hilos se entretejen a veces de manera calculada, natural pero metódica, aunque en otras ocasiones (las más) de manera caótica.

JUSTIFICACIÓN - ACCIÓN

Tenemos unas anécdotas y vivencias que surgen del contacto diario con nuestro entorno y de la compañía de personas cercanas a nosotros: familiares, amigos, etc. Ocurren multitud de situaciones, creamos planes, a veces pasan cosas imprevistas, o suceden otras sorprendentes. Se forma un conglomerado de lazos, situaciones que lo marcan a uno inconscientemente. Acontece muy a menudo que no nos paramos a pensar en lo que vamos viviendo, en saborear el momento, tomar perspectiva y ver el conjunto, el "dibujo" que se va formando. Narrar nuestras experiencias es como hacer nudos que amarren lo vivido, porque de otra manera caerían en el olvido. Contar historias, es una tradición que se desvanece en un mundo que no se cansa de inventar aparatos tecnológicos que cuentan historias por nosotros. El Quipú, invención milenaria de la civilización andina, curioso código de cuerdas, colores y nudos será el elemento articulador que nos permitirá, a lo largo del recorrido, ir anudando historias que hablen de la relación que los pobladores establecen tanto con el río como con su entorno. Estas historias serán grabadas en placas de Neolite, impresas e intercambiadas entre todos los habitantes.

MIRADAS PACÍFICAS

"MIRADAS PACÍFICAS" es el resultado del trabajo fotográfico de jóvenes del Distrito de Aguablanca y del corregimiento El Hormiguero cuyo tema de investigación es la cultura afrocolombiana en el marco del XI festival de música del pacífico "Petronio Álvarez". La interacción de dos grupos de una misma ciudad, identificados por su cultura pero con diferencias generadas por el entorno particular, permite un resultado formal que ofrece al espectador diferentes puntos de vista sobre un mismo tema. Este modelo hace parte de una propuesta de interacción entre los jóvenes caleños que hoy nos acompañan con jóvenes latinos de la ciudad de Filadelfia (EEUU), donde se desarrolla en la actualidad un proyecto paralelo.

PROCESO
A lo largo del proyecto que tuvo una duración de dos meses, se efectuaron visitas a diferentes lugares como El Hormiguero, San Cipriano, Pance y algunos barrios del Distrito de Aguablanca. Previamente a estas salidas se realizó una serie de ejercicios y charlas tendientes a reflexionar sobre la importancia del lenguaje fotográfico y de los elementos que podrían caracterizar a la cultura del pacífico. En ambos momentos del proyecto (ejercicios previos y visitas a diferentes lugares) cada uno de los jóvenes escoge diez fotografías para socializarlas ante el grupo, explicando las razones que lo llevaron a realizar esta selección y realizando un breve comentario de cada una de las fotografías seleccionadas.

EL RESULTADO

Se seleccionaron tres fotografías de cada uno de los participantes, las cuales estuvieron expuestas en las salas del Centro Cultural de Cali durante el tiempo que se realizaba en la ciudad el Festival de Música del Pacífico “Petronio Álvarez”.

ESTAMPAS DE CIUDAD

MIRADAS A LA CIUDAD

Mirar adentro

El arte últimamente ha desbordado los espacios de exposición tradicionales, de igual manera se ha pensado la ciudad como un espacio vital, donde se generan unas formas particulares de convivir y relacionarse con el entorno. Tratar de generar espacios donde la mirada desborde la cotidianidad y recoger las manifestaciones de otros lugares generalmente marginados, nos permite ir construyendo una visión más ampliada de ciudad.
Aguablanca, barrio Manuela Beltrán; un grupo de jóvenes y adultos comienzan un proceso, que consiste en desarrollar unas técnicas artísticas, en este caso un taller de estampado, mediante el cual no solamente se aprende la técnica, sino que también se tiene la posibilidad de pensar en las condiciones de vida que nos brinda el entorno.

EL DISEÑO

Mirar, Dibujar

No ha sido fácil comenzar, la cotidianidad nos envuelve con el manto transparente de la rutina. Qué debemos mirar, qué es digno de ser mirado para, a través del dibujo, convertirlo en diseño. Todo se evapora, se hace invisible, ¿Qué dibujamos?. ¿Serán buenos nuestros dibujos?

Fotografiando y transformando

Hay cosas que quisiera dibujar pero no me gusta el resultado, ¿Hay otra posibilidad?: La fotografía. Es como una máscara que me permite mirar ocultándome, es un proceso muy rápido. Es como un juego que me permite llegar a lugares a los que de otra manera no hubiera llegado, pero, ¿puedo transformar la imagen?

Creando diseños



El computador es una buena herramienta, pero las imágenes comienzan a sugerirme otras posibilidades: puedo combinar unas fotografías con otras; quitar partes que no me gustan o agregar elementos que recuerdo o imagino, es decir, puedo proponer mi punto de vista.

Mirar desde afuera

Una serie de camisetas, estampadas con los diseños creados durante el proceso, invitan a realizar otra mirada, desde afuera, con la posibilidad de diversas interpretaciones. ¿Quién se atreve?

Adaptación o transformación

Una imagen surge de nosotros, quizá al azar, muy probablemente sin ser premeditada, y, se convierte en un elemento susceptible de múltiples lecturas. ¿Qué había en el pensamiento de Karol cuando decidió fotografiar un caballo del barrio? Y ¿Qué pensaron la señora Luz y Liseth Damaris, cuando decidieron dibujar carretas?

Es muy probable que no hubiera un discurso elaborado; sin embargo, sus imágenes estaban cargadas de vivencias permitiendo con esto elaborar diseños que describen, no sólo una realidad particular, sino que esbozan interacciones de seres humanos en un mundo más complejo. Desde aquí podemos atrevernos a realizar una lectura, que parte ahora desde una mirada exterior; desde las posibilidades que nos brinda el punto de vista del otro.

¿Qué hace un caballo en la ciudad? Quizá esta pregunta desaparece en la cotidianidad de quienes no se dan la oportunidad de asombrarse (salirse de lo rutinario). La exposición invita, pues, a una reflexión a partir de una de las múltiples lecturas que podríamos encontrar en la imagen.

La imagen del caballo evidencia la relación entre adaptación y transformación y muestra la realidad de una economía agraria absorbida por la vida citadina.

Los animales terminan haciendo parte del nuevo paisaje, como si no hubiera pasado nada. En la imagen del caballo, el espacio citadino se ha cambiado por uno indeterminado: las calles y las casas han desaparecido.
Lo que producía un sentido de adaptación ha sido eliminado; la realidad se puede transformar.